La herencia hispana es resplandeciente a través de todas las Américas. Parte de esta herencia están las tradiciones culinarias, llenas de opciones saludables que cualquiera puede disfrutar. No sólo la típica combinación de arroz y frijoles (habichuelas), sino otros alimentos como los chiles, quínoa, plátanos y jícama. Exploremos algunos de sus usos culinarios y beneficios a la salud.

Frijoles y chícharos son únicos por su perfil nutricional que los hace parte del grupo de las proteínas y a su vez del grupo de los vegetales.[1] Los frijoles y chicharos son altos en proteína, fibra, folato, potasio, y antioxidantes, además proporcionan hierro y zinc. En toda América Latina incluyendo el Caribe es típico acompañar desde el desayuno hasta la cena a cualquier platillo con arroz y frijoles o habichuelas.

Los plátanos se pueden hornear, o freír como en tostones. Los plátanos son una fuente de vitamina A y potasio. Para reducir el contenido calórico se recomienda hornearlos o asarlos en vez de freírlos.   Pero si no se pueden resistir a los tostones o plátanos fritos, entonces hay que ser conscientes de la porción. Los plátanos pueden ser parte de un plan alimenticio sano, pero hay que saber cómo, por lo cual se recomienda consultar a un dietista registrado.

Los chiles por lo general dan ese sabor picosito a los platillos, aunque no siempre como en el caso de los chiles campana o pimientos que son dulces y realzan el sabor. Los chiles son una buena fuente de potasio y vitaminas A, y C. La cocina Mexicana es sobresaliente por la cantidad innumerable de platillos con chile que van desde ensaladas hasta postres. Pero en general, los chiles son parte de la dieta en las Américas.

La quínoa es muy nutritiva con suficientes minerales y antioxidantes. Su proteína contiene todos los aminoácidos esenciales que hacen de la quínoa una opción excelente de proteína vegetal. Media taza de quínoa cocida proporciona 8 gramos de proteína, y 5 gramos de fibra.[2] Ésta es también muy versátil y puede ser parte del desayuno, en una ensalada para el almuerzo, o con verduras y frutas como plato principal para la cena.
La jícama es un vegetal de México, pero su consumo se está propagando a otros países.  La jícama es crujiente y jugosa. Dado que es baja en calorías, y alta en fibra, es el dúo perfecto para equilibrar el contenido calórico cuando está acompañada de otros alimentos fritos tales como los tostones-plátanos fritos-.   En una taza de jícama hay tan solo 46 calorías, y 6 gramos de fibra, además de proveer calcio,magnesio, potasio, y vitamina C.[3]
La gastronomía hispana es más que sabor y tipo de alimentos. La cocina hispana es todo corazón y cultivar el espíritu familiar cuando se reúnen en la cocina al preparar y degustar los alimentos. Por todo eso, invitemos a otros, ya sean amigos y gente de diferentes nacionalidades a saborear nuestras tradiciones culinarias, que son todo a su vez, excéntricas y sencillas, deliciosas y saludables.

By Araceli Vázquez, MS, RDN, LD

[1] United States Department of Agriculture. ChooseMyPlate.gov website. https://www.choosemyplate.gov/vegetables-beans-and-peas. Accessed Sept 17, 2018
[2] United States Department of Agriculture Nutrient Database for Standard Reference Legacy Release, April 2018. https://ndb.nal.usda.gov/ndb/foods/Accessed Sept 17, 2018
[3] [3] United States Department of Agriculture Nutrient Database for Standard Reference Legacy Release, April 2018. https://ndb.nal.usda.gov/ndb/foods/Accessed Sept 17, 2018